Acoso laboral (mobbing): qué es y cómo detectarlo
El acoso laboral, también conocido como mobbing, es una realidad silenciosa que afecta a muchas personas en su entorno profesional. Este tipo de violencia psicológica sostenida en el tiempo puede tener graves consecuencias en la salud emocional, la autoestima y el rendimiento laboral de quien lo sufre. Identificarlo a tiempo y actuar con firmeza es clave para proteger el bienestar personal y profesional.
Qué es el acoso laboral o mobbing
El mobbing se refiere a una conducta hostil y repetida por parte de uno o varios miembros de un entorno laboral hacia otro trabajador. Estas acciones pueden ir desde comentarios despectivos, aislamiento social, sobrecarga de tareas injustificada, hasta difamación o amenazas veladas.
Aunque puede manifestarse de formas muy diversas, el elemento común es que estas conductas tienen la intención de desgastar psicológicamente a la víctima, muchas veces con el objetivo de que abandone su puesto de trabajo.
Señales para detectar el acoso laboral
Detectar el acoso laboral puede no ser sencillo al principio, ya que muchas conductas se camuflan como bromas o exigencias propias del trabajo. No obstante, existen ciertas señales de alerta:
Aislamiento social: exclusión sistemática de reuniones, actividades o conversaciones.
Críticas constantes: comentarios negativos desproporcionados sobre el trabajo o la personalidad.
Rumores o difamaciones: propagación de información falsa o humillante.
Sobrecarga o retirada de tareas: asignación de responsabilidades imposibles o, por el contrario, la negación de tareas que justifiquen el puesto.
Amenazas veladas: insinuaciones sobre despidos o represalias sin base real.
Consecuencias del acoso laboral
El mobbing no solo afecta el ámbito profesional, sino también la salud mental y física de la persona. Entre sus efectos más frecuentes se encuentran:
Ansiedad, insomnio o depresión.
Pérdida de autoestima.
Estrés crónico y enfermedades psicosomáticas.
Aislamiento social y desmotivación.
En casos extremos, puede incluso derivar en bajas laborales prolongadas o abandono forzoso del trabajo.
Qué hacer si estás sufriendo acoso laboral
1. Reconocer la situación
Aceptar que se está siendo víctima de mobbing es el primer paso para actuar. Muchas personas minimizan lo que les ocurre o se sienten culpables. Reconocerlo es clave para recuperar el control.
2. Documentar los hechos
Llevar un registro detallado de los incidentes (fechas, testigos, mensajes) es fundamental en caso de presentar una denuncia. Esta documentación sirve como evidencia para respaldar la situación.
3. Buscar apoyo profesional
La ayuda psicológica es crucial para gestionar el impacto emocional del acoso.
4. Informar a recursos humanos o superiores
Siempre que sea posible, es recomendable notificar la situación a las instancias correspondientes dentro de la empresa. En organizaciones con protocolos establecidos, puede iniciarse un procedimiento formal de evaluación del conflicto.
5. Conocer tus derechos
Es fundamental informarse sobre los derechos laborales y las vías legales disponibles. En España, el acoso laboral puede denunciarse ante la Inspección de Trabajo y Seguridad Social, que investiga estos casos y puede intervenir legalmente.
El acoso laboral o mobbing puede tener un profundo impacto en la salud y el desarrollo profesional. No estás solo/a, y existen recursos y profesionales que pueden ayudarte a salir de esta situación. En Segura Psicólogos, te acompañamos a recuperar tu bienestar emocional y a fortalecer tus herramientas personales para enfrentar entornos laborales tóxicos con firmeza y confianza.
